4.TESTIMONIOS

ANTES

DURANTE

DESPUÉS

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3. Las FARC  deben ser obligadas a entregar los bienes y recursos producto de sus actividades criminales para reparar a las victimas. También deberán entregar las armas para ser destruidas.

 

4. Queremos una paz que de tranquilidad a nuestra democracia y no concesiones al terrorismo que generen el riesgo de vivir la misma tragedia sufrida por la hermana Venezuela.

Estos son los puntos que exige el partido frente al plebiscito.

 

En primera instancia es oportuno analizar que lo que da este plebiscito es la facultad de firmar la paz al presidente Santos. Si gana el no, el congreso de la republica tendrá derecho sobre la situación y podría incluso devolverle la facultad al presidente de hacerse cargo. También hay que tener en cuenta que el umbral electoral debe ser mayor al 13%, eso quiere decir que deben votar al menos cuatro millones de habitantes.

 

Ahora el problema es que la gente realmente no sabe qué es lo que esta firmando. No hay suficiente información sobre los acuerdos en La Habana.

 

Aunque es innegable que es uno de los movimientos más fuertes del país siendo el partido con la mayor cantidad de militantes, son ahora el único partido que le hace campaña al no. El gobierno de Santos tiene mucha oposición, pero como tal el plebiscito por la paz solamente tiene al centro democrático como participe por el no.

 

Ahora el punto es que no es tanto Uribe el que esta moviendo el no, es que los seguidores tienen muchos mas claros los argumentos en contra, es mucho más fácil pedir los cambios con base a algo que ya está que reunir y poner de acuerdo a todo el mundo. De cierta forma, es más sencillo conseguir votos por el no por poner muchas personas en contra de diferentes argumentos, que poner de acuerdo a todos por el si con exactamente los mismos argumentos.

 

Ahora es innegable que Uribe, por su historia política tiene una fanaticada entera, dedicada a seguirlo a ojo cerrado. A quienes no necesita ponerle argumentos. Pero estas personas no fueron capaces de poner lo que Uribe esperaba en el 2015.

 

Lamentablemente esta paz se nos ha convertido en una votación por presidencia como la pasada, se ha convertido en una política de campaña de gobierno no para impulsar la paz, sino para incrementar la imagen positiva de éste. Una lucha de cosas personales y contradictorias donde realmente no sabemos quiénes con quiénes están peleando.

 

 

Es innegable que desde el momento en que el presidente Santos anuncia que esta en busca de acuerdos de paz, esta se vuelve una palabra política utilizada netamente para mover votos. Un engaño a los ciudadanos intentando venderles la idea de un país en paz que no se puede conseguir con un simple acuerdo firmado en la habana. Santos empieza a hablar de negociaciones de paz desde su primer mandato, pero la paz se convierte en el símbolo de su segunda campaña.

 

Pero la campaña empezó mucho más agresiva después del 25 de mayo cuando la competencia estaba solamente entre Oscar Iván Zuluaga, con el Centro Democrático y Juan Manuel Santos con el Partido de la U, o más bien la unidad nacional. Veíamos al mismísimo Manolo Cardona, el mismo que nos vendía Bonice y Popetas, en los comerciales, ahora ofreciéndonos votar por Santos, votar por la paz.

 

Desde ese momento el concepto de paz empezó a ser tergiversado, no nos decían vote por Santos, sin decirnos al mismo tiempo vote por la paz. La asociación entre paz y elección política se volvió frontal. El problema es que también se empezó a conceptualizar el hecho de que votar por Oscar Iván Zuluaga era votar por la guerra, lo cual tampoco era correcto. En Uribe se empezó a ver la oposición a este gobierno. Una oposición exagerada que nos plantea un futuro incierto cercano a la situación venezolana. Lo cual es exagerado y manipulador. Pero también es aceptable y reconocible que la mala forma de enviarle la información a las personas es la que ha causado tanto polarización.

 

Cuando empezó esta campaña el no todavía no tenia campaña y el partido realmente tenia claro cuál era el paso a seguir, pero a consecuencia de la reducción del umbral se dieron cuenta que no podían abstenerse de votar ya que le asegurarían el triunfo al si. Así que como partido decidieron votar por el no.

 

Estuvimos conversando con Carlos Córdoba director de sectores juveniles. Su conversación comenzaba con que hacerle una campaña al no, no es un capricho de Uribe, siempre hay un uso de la democracia que caracteriza al partido para llegar a las metas propuestas. Desde el estudiantado que sigue al partido, los colectivos juveniles, etc. Actúan en torno a las conclusiones a las que llegan después de debatir.

 

1: el pueblo exige refrendar los acuerdos de la Habana, punto a punto de manera transparente y sin cambiar las mayorías legales de participación ciudadana.

 

2. los acuerdos deben garantizar mínimos esenciales para la verdadera paz; justicia, verdad, reparación de victimas y garantía de no repetición. Contemplar cárcel para los culpables de crímenes de lesa humanidad. Y de narcotráfico, que no deben ser premiados con elegibilidad política.

 

 

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Universidad Externado de Colombia

 

Convergencia.

 

Zayro Blanco Gutiérrez

 

Juan David Bustos

 

Santiago Cañón Parada

 

Karem Contreras 

 

Alejandro Cuevas

 

Juan David triviño.

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